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jueves, 8 de octubre de 2015

LA PRESENCIA DE LA CRUZ EN LA IGLESIA


EN LAS IGLESIAS


Prebisterio



Crucificado de la Parroqia de Siruela





Crucificado de la catedral de la Almudena de Madrid


Cristo de la Buena Muerte de Juan  de Mesa 1621





Cristo de la iglesia de San Martín de Tour, Fromistan


SOBRE EL ALTAR

En el número 308 de la Ordenación General del Misal Romano se lee:

Resultado de imagen de cruz en el altar

 308. Igualmente, sobre el altar, o cerca de él, colóquese una cruz con la imagen de Cristo crucificado, que pueda ser vista sin obstáculos por el pueblo congregado.



 Es importante que esta cruz permanezca cerca del altar, aún fuera de las celebraciones litúrgicas, para que recuerde a los fieles la pasión salvífica del Señor.
 Da opción al celebrante para colocar el Crucifijo sobre el Altar o a su lado.


 Lo propio es colocar la Cruz en el centro del Altar, sobre el mismo, y, si fuera posible, con la imagen pintada o esculpida de Nuestro Señor en ambas partes, de modo que tanto el sacerdote como el pueblo pueda ver claramente al Redentor crucificado durante la Santa Misa.

La Misa es “Santo Sacrificio”, memorial de la pasión, muerte, resurrección y ascensión de Nuestro Salvador. Y al poner la Cruz sobre el Altar, como se hace siempre en las Misas celebradas en el Vaticano,



con la disposición de velas tal como aparece en la imagen de arriba, es porque de ese modo se redunda más en el aspecto sacrificial de la Misa: aspecto que queda reducido, o casi eliminado, cuando la Misa se convierte, en la intención del celebrante o equipo de liturgia, en mera fiesta que solo lleve a la resurrección pero obviando el sacrificio expiatorio de Cristo en el Calvario.


La Cruz sobre el Altar ayuda mucho al sacerdote a mantener la mirada en Cristo crucificado, para así asumir que celebra la Misa cara a Dios (como se desarrolla en un artículo anterior) y no como un protagonista frente al pueblo.

 La Cruz sobre el Altar resta protagonismo al cura para dárselo a Cristo, y redunda que TODOS (el sacerdote junto al pueblo) celebran Misa mirando a Dios.



EN ALGÚN OTRO LUGAR

La devoción es tan grande que muchos templos, al no ser posible rezar ante los pies de Cristo Crucificado, es frecuente

                           Iglesia de Siruela
encontrar un Cristo y poder rezar a sus pies.


Iglesia de Jesús el Pobre de Madrid.

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